lunes, 28 de mayo de 2012

Dale con el potato, chabon.

Buenas, voy a contarles algo desesperante ya para mí.
Y otra vez paso, no sé que me vieron esta vez pero bueno.
Como antes era muy de costumbre que la gente se confundiera con mi género, ya sea por llevar pelo corto y ropa suelta (que aunque no lo crean es de mujer), o por mis rasgos faciales pequeños, de nuevo me confundieron. Un señor remisero, al cual fui a pedirle sus servicios me dijo: -Subí a éste, Papá. Yo asentí con la cabeza y opte por subir sin decir nada.
Fue como... ¿Qué carajos? Ya empezamos con lo mismo. Pero si ya me creció el pelo, tengo más cara de nena, y toda la bola. Pero si serán tan hijos de esas madres que trabajan en la ruta por dinero y por placer, puede ser que la gente se pone en complot para decirme que soy un varóncito. "Papá" encima, ni que fuera re grandote y macho, mierda. Y sí, yo iba sentada, tranquilamente en el remis, indicando a donde tenía que ir, porque el pobre estaba mas perdido que un pingüino en el desierto. Y yo pensaba que en algun momento debió de haberse dado cuenta que yo soy mujer por el sonido de mi voz, pero no se percato, y me seguía diciendo "Papá"; ¿Doblo en ésta, Papá? ¿Sigo derecho, Papá? ¿Es en la que viene, Papá? Etc...
Sí, señor, dobla acá. Síii, señor, siga derecho. Síiii, señooooor, es la siguiente... ¡PERO NIETO DE UN GRAN COMEDOR DE ÓRGANOS REPRODUCTIVOS! ¿CUÁL ES LA NECESIDAD DE AGREGARLE EL "PAPÁ" A TODO?
Tenía ganas de matarlo, me estaba colmando la paciencia con tantas papá's, que me podría preparar cinco pastel de papa, tres porciones de puré, cuatro tortilla, un cono de papas fritas y si quería, más todavía.
Al final de todo esto, cuando llegué a mi destino, al hogar de mi viejo, le pregunte delicadamente cuanto me costaría y me contesto: - Serían doce pesos... querida...
Ahora me venís a decir "querida" como para tratarme de mujer, después que me trataste de un marimacho por aproximadamente 15 minutos, pedazo de forr... correctamente dicho, preservativo, preservativo usado y mal gastado... Y si queres también pinchado por hacerme sentir tan incómoda conmigo misma en todo el recorrido con voz de Cacho Castaña (?) Gracias, ¿eh? Gracias. ¡Qué malo!
¿A vos te parece? Porque a mí, no.
Adiós.